Nuestro Responsable de Operaciones opina sobre esta noticia:
Es absolutamente irresponsable puesto que los usuarios de seguros son particulares, no profesionales y, el hecho de que se les «premie» por denunciar supuestos fraudes, es un incentivo que vulnera la objetividad y además, puede generar perjuicios a terceros en cuanto a posibles irregularidades. Todo ciudadano, en cumplimiento con el Código Penal vigente, está obligado a denunciar a las autoridades competentes cualquier delito del que se tenga conocimiento. Por lo tanto, si el fraude es un delito, por imperativo legal, debería denunciarlo, no obstante, entendemos que los fraudes a aseguradoras deben ser analizados e investigados de manera profesional y legitimada y no causando perjuicio al investigado.
Noticia: Prensa periódico El Mundo