El cuerpo del detective privado contratado por los padres de Madeleine McCann y que fue acusado de estafarles 300,000 Libras esterlinas, ha aparecido sin vida y empapado en sangre en su mansión de SurreyKevin Halligen que fue contratado por los McCann, estuvo involucrado en una disputa y fue acusado de engañar al fondo para encontrar a la pequeña Madeleine mientras llevaba un estilo de vida lujoso pero sin conseguir ningún resultado sobre la desaparición de la niña.
Kevin Halligen, de 56 años, apodado «capa y espada» que pretendía ser un espía al estilo de James Bond, se hizo cargo de la investigación privada del caso en marzo de 2008.
Pero ahora, con el descubrimiento de su cadáver, el misterio rodea su muerte, y la policía ha iniciado una investigación a fondo.
Un ex colega de Kevin dijo a MailOnline: «La casa estaba cubierta de sangre, pero aparentemente eso se debía a que Kevin se había caído»
Su muerte está siendo estudiada como inexplicable, pero una fuente que conocía bien al investigador privado, dijo que era «un boozer» (bebedor) y que «la bebida era constante en su vida y quizá le provocó su caída».
Halligen era el director ejecutivo de los investigadores privados Oakley International cuando fue contratado por los McCann.
Un amigo cercano de los padres de Maddie dijo a The Sun Online: «El hombre era un loco. Prometió muchas cosas que nunca se cumplieron»
Por otro lado Los padres de Maddie se aferran todavía a un atisbo de esperanza de que su hija, que ahora tendría 14 años, todavía pueda estar viva.
El portavoz de los McCann, Clarence Mitchell, dijo este sábado «Mis clientes No tuvieron ninguna relación posterior con Kevin Halligen después de la terminación de su contrato con Oakley International y bajo estas circunstancias no comentarán ahora. Claramente, este es un asunto para la policía y la oficina del forense».
Fuente: Exclusiva Digital
